After Burner fue publicado por SEGA para recreativas en Noviembre de 1987. Su diseño fue a cargo de uno de los trabajdores punteros de la compañía nipona, Yu Suzuki, que ya había sorprendido con títulos como Hang-On o OutRun. Como en esos títulos que hemos comentado, con After Burner, Suzuki volvía a llevar a la compañía japonesa a lo más alto en lo que se refiere a popularidad dentro de los salones recreativos por todo el mundo.
Aunque tanto el diseño como la distribución fue a cargo de la propia SEGA, para las diversas versiones domésticas que fueron apareciendo la distribución fue a cargo de otras compañías especializadas en estas lides como Activision o Tengen.
En After Burner nos ponemos a los mandos de un F-14 tomcat y debemos introducirnos en territorio enemigo con tan solo la metralleta y un número limitado de misiles. Nuestra misión será la de conseguir que el vuelo de nuestros enemigos finalice antes del nuestro. Para ello contamos con nuestros «after burners» que nos permitirán incrementar rápidamente nuestra velocidad aunque reduciéndose nuestra precisión.
El videojuego nos presenta nuestro avión visto desde atrás, intentando simular una visión tridimensional. Podíamos hacer elevar y descender la nave además de girarla y ayudarnos de un punto de mira para destruir los aviones enemigos. Éstos aparecían y se movían rápidamente, siendo en ocasiones un buen número, por lo que el juego era un verdadero reto. De hecho una de sus principales bazas era el gran dinamismo y velocidad del que constaba After Burner, acercandose más a la acción que a la simulación, algo muy típico de las obras de Yu Suzuki de la época.
El diseño gráfico tenía un gran colorido y, aunque no era muy variado, cumplía bastante bien en el diseño de los aviones. Los escenarios eran bastante más simples aunque, debido a la alta velocidad del juego, practicamente era inapreciable, por lo que su falta de variedad durante no influía demasiado negativamente. La principal característica del juego era su velocidad que no dejaba ni un momento de respiro. After Burner está claramente influenciado por la película Top Gun, un film protagonizado por Tom Cruise que tuvo mucho éxito en los años 80.
El seguimiento de este juego fue muy positivo, siendo un hito en los salones recreativos, gracias en parte a las espectaculares máquinas donde estaba implementado. Debido a este éxito no se tardó en realizar conversiones a los dispositivos domésticos más populares de la época: Amiga, Amstrad CPC, Atari ST, NES, 32X, Mega Drive/Genesis, Master System y PC. En el mismo año de publicación del juego se publicó After burner II que, quizá, no debería considerarse una secuela, sino un lavado de cara con nuevos niveles. En Octubre de 2006 se publica After Burner Climax para recreativas y consolas de nueva generación, en el que se conserva el espíritu original pero con gráficos actualizados a las nuevas tecnologías. Además, se espera que para la primavera de 2007 se lance una version para Sony PSP llamada After Burner: Black Falcon.
En este video podéis ver cómo es After Burner:
Y en éste cómo es el nuevo After Burner Climax:

En 1990 Chris Roberts, diseñador de Origin Systems, iniciaría para PC la primera gran saga de videojuegos de ciencia ficción. Esta serie, aunque sería superada años más tarde, sería el referente para los distintos juegos del género posteriores, incluidos los del universo Star Wars.
La historia se ambienta en el siglo XXVII, la humanidad se encuentra amenazada por una raza de felinos llamada Kilrathi. Para enfrentarse a ella, se crea la organización multinacional conocida como Terran Confederation, cuya misión es reclutar a los mejores pilotos del planeta. Cogemos el papel de un piloto a bordo del mítico TCS Tiger’s Claw., que pronto conseguirá prestigio y liderará los ataques contra los Kilrathi.
El juego comienza en la nave nodriza, que hacia las veces de menú principal, en la que visitando las distintas habitaciones podíamos obtener información de las misiones a realizar. Después ya pasamos a la acción, teniendo que realizar las diferentes misiones, que suelen consistir en llegar a un punto y destruir algún elemento importante del enemigo. Aunque las misiones son algo monótonas, la historia y las instrucciones de la misión le dan un aspecto más peliculero que ayuda a la inmersión en el argumento del juego. El control del juego es algo complicado, ya que no el título no pretende ser un arcade sino un simulador, algo que le valió en su día la crítica de muchos jugadores.
Wing Commander fue una revolución en el aspecto técnico. Todo se cuidó de una forma excepcional, sacándole todo el jugo a las tarjetas VGA y con un sonido excelente que ambientaba el juego de una forma increible. Aunque los gráficos no son realmente en 3D, la simulación del entorno tridimensional está bastante conseguido. Pero el punto más destacado son las escenas cinemáticas, que ayudan a ambientar una historia ya de por sí bastante cuidada, y que no tenían precedentes de tan alta calidad.
Aunque fue originalmente concebido para PC, pronto habría conversiones para
La saga tuvo una gran cantidad de secuelas. Inicialmente vinieron las expansiones para el primer título: The Secret Missions 1 y The Secrets Missions 2. En 1991 vendría Wing Commander II: Vengeance of the Kilrathi, con sus respectivas expansiones Special Operations 1 y Special Operations 2. En 1994 saldrían dos productos, por un lado Super Wing Commander, que era una revisión del juego original para la
En esta ocasión os pongo un artículo redactado por darkpadawan que es un gran entendido en el tema de videojuegos de Star Wars y al que desde aquí quiero agradecerle su colaboración tanto con mi blog como con nuestra serie de Grandes Álbumes en
El resultado fue sobresaliente en todos los sentidos. Para la época, graficamente el juego era una delicia, con un motor gráfico que aproximaba las 3D de modo muy convincente. En cuanto al apartado sonoro, los sonidos eran muy correctos, y la música utilizaba el sistema IMuse, que reaccionaba en función de los acontecimientos, lo que hacía que sólo por la música que se escuchaba en un momento determinado el jugador podía adivinar lo que sucedía a lo largo de una misión.



