De las compañías francesas que se encuentran activas actualmente en el mercado del videojuego, sin duda alguna y a pesar de las enésimas polémicas en las que se encuentra envuelta desde su posición de distribuidora, la más destacada es Ubisoft. No deja de ser curioso que una de las casas de referencia en la escena internacional tenga un origen pequeño e incluso, en cierto aspecto, romántico.
Los orígenes de Ubisoft hay que buscarlos en la Bretaña francesa en 1986, cuando los cinco hermanos Guillemot: Claude, Michel, Gérard, Christian e Yves, siendo este último el actual director de la compañía y el miembro más destacado en su fundación. Su debut llego con la aventura Zombi, si bien también actuaría como adaptador en Francia de títulos como Trivial Pursuit o Defender of the Crown. A finales de los 80 alternaba conversiones y localizaciones de títulos de otras compañías con videojuegos propios como Asphalt, ST Krak, Night Hunter, Puffy’s Saga, Iron Lord… que sirvieron principalmente para que los Guillemot fueran realizando contactos con diversas casas de distribución para el mercado francés y que fue el primer paso hacia el salto internacional que llegó definitivamente en los 90.
En el primer lustro de dicha década, empieza su expansión, inicialmente por Estados Unidos, Reino Unido y Alemania, en el que realiza una labor principalmente de distribución, aunque paralelamente se abrió un estudio en Montreuil con fichajes como Michel Ancel y donde se iba gestando el que iba a convertirse en su mayor éxito hasta la fecha: Rayman. Con un trabajo de desarrollo iniciado en 1992 por el propio Ancel y con una publicación final en 1995, Rayman se convirtió en todo un fenómeno internacional y dio comienzo a una saga con más de dos décadas de historia.
Este éxito ayudó a su expansión y a dar un salto como compañía, centrándose en la distribución. Para ello empezó a comprar otros estudios, como es el caso de Red Storm Software o Blue Byte, lo que le dio acceso a franquicias interesantes como The Settlers, Prince of Persia, Beyond Good and Evil o los titulos asociados al escritor Tom Clancy. De igual manera, fue pionera a la hora de adentrarse en los juegos online de forma seria con Everquest, The Matrix Online o Uru: Ages Beyond Myst.
Este proceso de expansión se encuentra en su máximo esplendor, siendo poseedora de los derechos de algunas de las sagas más importantes de la actualidad como Assassin’s Creed, Far Cry, Just Dance o Anno. Quizá este rol de liderazgo en distribución es lo que le ha llevado en los últimos años en meterse en diversas polémicas al respecto de las protecciones de copias o por los contenidos DLC.
En este vídeo podéis ver la evolución de Ubisoft a través de sus logos:







Defender of the Crown fue publicado por Cinemaware con un diseño de Kellyn Beck en 1986. Su lanzamiento original fue para el 
La pantalla principal del juego es un mapa de inglaterra dividido en istintos territorios. Al empezar cada señor tiene tan solo un territorio donde estará su castillo. poseemos una tropa de campaña que la podremos enviar a otros territorios los cuales, si no hay nadie serán conquistados. Si existen tropas enemigas se luchará con ellas por el control del territorio. En estos terrenos encontraremos nuevos reclutas para nuestras tropas, por lo que podremos ir moviendolos y repartiéndolos entre nuestras tierras.
Pero Defender of the Crown no solo consiste en ir conquistando territorios sin más, sino que existen más eventos. Por ejemplo, un señor feudal puede organizar un torneo de justa entre los distintos señores. Allí podremos batirnos por conseguir fama y honor, o para apostar tierras con otros señores.
Para atacar los distintos castillos hay dos maneras. Por un lado podremos intentar adrentarnos en la noche con la ayuda de los hombres de Robin Hood y saquear los castillo en busca de oro (que nos permitirá mejorar las tropas) o de alguna bella dama sajona secuestrada. por otro lado podemos hacer un ataque más serio con catapultas e intentar hacernos con el castillo y todas las tierras de su dueño.
En el apartado técnico el videojuego supuso una revolución. Unos impresionantes gráficos, con buenas animaciones y numerosas escenas de introducción, acompañadas por una buena banda sonora y acertados efectos especiales. A esto hay que sumar una inteligencia artificial bastante avanzada para la época. Las prisas de Cineware por sacar el videojuego hizo que la versión de Amiga no estuviera tan completa como querían sus creadores. Alguna de las funciones (sobre todo en el campo de la profundidad de la estrategía) no fueron finalmente implementadas, aunque sise añadirían a las posteriores conversiones. Estas conversiones, por contra, tenían un nivel gráfico más bajo, ya que ninguna máquina llegaba a la potencia de Amiga.
Las conversiones se hicieron para PC,